martes, 28 de abril de 2015

Nuestra clase

Es martes y...

Igual que dos siameses que se miran y sonríen. Al igual que todo lo que escribo es vuestro. Como el náufrago que busca una estrella que le guíe. Como el médico que cura "el ala rota del maestro".

Así de unidas parpadean nuestras pestañas y la mirada de quienes hacen suya nuestra educación. Escultores que trabajan con la delicadeza de un susurro y el compromiso de quien sabe que tiene, ante sí, la más valiosa de las joyas. Juglares que moldean el más sincero de los versos en la más amable de las canciones. Arquitectos que diseñan páginas en blanco de libertad. 

Mientras tanto, la hiena financiera, lista para arrasar el recinto público, acecha tras los cristales del gobierno. Debemos permanecer despiertos, en estado de alerta permanente. Quieren instalar, presente incierto, un futuro voraz y decadente. Debemos permanecer insomnes, en estado de alerta duradero. Quieren arrancarnos nuestras aulas, infectándolas con su sucio dinero. Debemos permanecer agudos, en estado de alerta persistente. Si quieren un rebaño de corderos mudos, seremos el grito más potente.

Somos implacable evolución, morada de un infinito inabarcable, incesante estado de actualización, reacción ante la duda inagotable. Somos huella colorida de su lienzo. Somos cultura de la emoción. Somos la cosecha de su esfuerzo. El refuerzo que ilumina su lección.

1 comentario:

  1. Bella reflexión. Como dijo el Gran Poeta, "caminante no hay camino, se hace camino al andar. Espero que al final de este año, sintamos que debajo de nuestras huellas, un ansiado nuevo camino va naciendo y todos nosotros, juntos, nos atemos los sueños a los zapatos para que la realidad del cambio deje de ser ESPERANZA, convirtiéndose en una grata REALIDAD. De todos nosotros depende ese gran CAMINO que se intuye en el horizonte.

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